Paquete Económico para el ejercicio fiscal 2024 (primera parte)…

Por Redacción Sep 11, 2023

Por Carlos Germán Palafox Moyers

Hermosillo Sonora 11 de septiembre 2023.-El Paquete Económico es la propuesta que elabora la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre los ingresos, egresos y balances de un ejercicio fiscal; en él se define cómo el gobierno federal recaudará dinero y ejercerá el gasto público el próximo año.

Del contenido de este Paquete, destacan esencialmente dos documentos: 1) la iniciativa de Ley de Ingresos que contiene la estimación de lo que percibirá el Estado durante el ejercicio fiscal; y, 2) el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, cuyo contenido contempla todas las erogaciones del gasto gubernamental.

El Paquete Económico para el ejercicio fiscal 2024 se enmarca en un sexenio trascendental para la historia de nuestro país, y con el cual se busca consolidar un proyecto de transformación de la vida pública de México cuyo soporte ha sido un conjunto de políticas públicas enfocadas en la reducción de la pobreza y la desigualdad, donde el Estado es el principal promotor del desarrollo nacional. El Paquete Económico que se propone asegura darle la continuidad a un proyecto de nación enfocado en el desarrollo social compartido, con estabilidad económica y prudencia en el manejo fiscal.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha logrado revertir políticas ortodoxas de tipo neoliberal que limitaron el crecimiento económico y subestimaron el impacto de la intervención estatal en el bienestar de los sectores de la población más desfavorecidos. La política económica de la actual administración federal ha sido capaz de romper tendencias históricas perjudiciales para el desarrollo sin incurrir en desequilibrios fiscales ni comprometer la estabilidad económica de México. Los principales cambios de tendencia están alineados en tres ejes fundamentales, a saber: I) el fortalecimiento de la red de protección social, en favor de grupos de la población desatendidos y en condición de pobreza; II) las reformas en materia laboral y de política salarial, las cuales han propiciado una mejor distribución del ingreso en beneficio de la clase trabajadora; III) y el impulso de proyectos de infraestructura, particularmente en la región sur-sureste del país, la cual estuvo al margen del desarrollo nacional por décadas.

I) Fortalecimiento de la red de protección social. Con esta administración, se estima que los niveles de gasto en protección social se mantengan por arriba de la tendencia observada en administraciones anteriores en al menos 1.8 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB) para el cierre de 2024. En este punto resalta la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, que tiene una cobertura universal y beneficia a alrededor de 11.4 millones de personas. Cabe destacar que los recursos destinados a este programa son 7.4 veces mayores en términos reales respecto a 2018, lo cual ha permitido aumentar la pensión de 1 mil 160 pesos bimestrales a 4 mil 800 pesos en 2023, mientras que en 2024 aumentará a 6 mil pesos bimestrales. Este monto será 1.8 veces mayor a los ingresos de la línea de pobreza extrema rural y 1.4 veces los ingresos de la línea de pobreza extrema urbana. Igualmente, los recursos destinados a programas como la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente se incrementarán en 2.4 veces en términos reales entre 2019 y 2024. Los efectos de esta nueva política social se han visto reflejados en una reducción histórica de la pobreza. Con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en lo que va de la administración se ha observado una reducción tanto en la tasa como en el número de personas en condición de pobreza. En 2022 se registró una disminución de 5.1 millones de personas en condición de pobreza respecto a 2018 y, por primera vez desde que se tiene registro, el porcentaje de la población en esta condición se mantuvo por debajo del 40%.

II) Reformas en materia laboral. El cambio en la política salarial y los recursos para programas sociales no han mostrado afectación en el empleo ni han generado dependencia económica. Por el contrario, la participación laboral y la generación de empleos han alcanzado los niveles más altos desde que se tiene registro, en particular en diversos grupos de la población que tenían una baja participación laboral remunerada, como es el caso de las mujeres. Al quinto año de la administración, la participación laboral femenina pasó de 44.0% en el cuarto trimestre de 2018 a 46.1% en el segundo trimestre de 2023, lo cual equivale a 3 millones de mujeres que hoy están empleadas o buscando emplearse. El conjunto de reformas legales e institucionales en materia laboral ha contribuido a mejorar las condiciones de vida de las y los trabajadores mexicanos. Por ejemplo, la política salarial ha impulsado el aumento al salario mínimo, el cual pasó de 88.36 pesos diarios en 2018 a 207.44 pesos en 2023, y que, en términos reales, representa un crecimiento de 86.7%. Esto sin generar desempleo o espirales inflacionarias, contrario a lo que algunos analistas habían pronosticado. Como resultado, el nivel actual del salario mínimo es capaz de cubrir 1.5 canastas básicas en zonas urbanas y 2 canastas en zonas rurales.

III) Impulso de proyectos de infraestructura. A los logros en materia de desarrollo social, empleo y distribución del ingreso, se suma el mayor nivel de inversión pública con impacto directo en el crecimiento económico a través del desarrollo de múltiples proyectos de infraestructura, los cuales aumentarán la capacidad productiva y la conectividad entre regiones. Destaca el caso de la región del sur-sureste del país, donde las inversiones tendrán una alta tasa de retorno y se lograrán reducir las brechas de desarrollo, rezago social, marginación y pobreza de manera más amplia y rápida. La inversión en infraestructura es un primer paso para incrementar la conectividad en el mercado nacional y aprovechar la coyuntura global para potenciar la integración comercial de México con el resto del mundo, así como disminuir los costos de transporte y elevar la productividad. Por ello, entre 2020 y 2022, el Gobierno de México dispuso un paquete de 61 proyectos de inversión a fin de expandir la infraestructura pública, que incluye la modernización de carreteras y puertos, así como de plantas de licuefacción de gas natural y manejo de residuos, con una inversión de 482 mil millones de pesos. La inversión pública en transporte ha resultado en 1 mil 68 kilómetros nuevos de carreteras, equivalentes a la distancia entre las ciudades de Puebla y Monterrey. Es importante resaltar que los proyectos del Tren Maya y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec agregarán más de dos mil kilómetros de nuevas vías férreas a los 26 mil existentes; esto equivale a más de una tercera parte de lo que se añadió a la red entre 1916 y 2018. Con el Tren Maya se generarán ingresos por turismo y una derrama económica que llegará a todas las regiones de México. De igual forma, con el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, se podrán movilizar más de 130 toneladas a una velocidad máxima de 65 km por hora por vía ferroviaria, y así reducir el tiempo de traslado en 70% entre el océano Pacífico y el Golfo de México.

Las políticas públicas efectuadas durante esta administración han permitido robustecer el mercado interno, de tal manera que su contribución al crecimiento de la actividad económica ha aumentado respecto a otros sexenios. Así, México se ha convertido en una economía menos dependiente del exterior, con una capacidad para enfrentar de mejor manera los retos provenientes del entorno global. Si bien el desempeño del sector industrial mexicano está altamente relacionado con el de Estados Unidos (EE.UU.), desde 2022 el PIB de México ha crecido por arriba del PIB de nuestro principal socio y país vecino, lo cual indica que la economía mexicana ha tenido como principal fuente de crecimiento sus factores internos.

En este contexto, se prevé que en 2023 y 2024 la economía mexicana alcance crecimientos reales anuales en rangos de entre 2.5 y 3.5% en ambos años, lo cual es superior a las estimaciones planteadas en el Paquete Económico 2023. Para el cierre de la administración se espera que por tercer año consecutivo la economía mexicana crezca por arriba de la economía estadounidense, y algo también muy relevante, que ese crecimiento sea con estabilidad macroeconómica y finanzas públicas sanas.

Como hemos visto, las perspectivas sobre el desempeño de la actividad económica y su contribución al bienestar de las personas son positivas. Si bien se ha observado una recomposición gradual en la pirámide poblacional, al igual que en otros países del mundo, México mantendrá un bono demográfico que le permitirá contar con una fuerza laboral amplia, diversa y bien capacitada, algo muy favorable para el fortalecimiento de su mercado interno y también para mantener el atractivo del país como destino de inversiones extranjeras.
En la próxima entrega se analizará el entorno de finanzas públicas, balances públicos y la deuda pública.
Subsecretario de Egresos de la Secretaría de Hacienda Sonora y Maestro de Asignatura del Departamento de Economía de la Universidad de Sonora

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